sábado, 5 de octubre de 2013

Los mártires mercedarios y su vinculación con la Provincia Mercedaria de Chile.


           
Dentro de pocos días seremos testigos de la beatificación de 19 religiosos mercedarios de la provincia Mercedaria de Aragón, España. Muy pocos saben de la vinculación que existe con la provincia mercedaria de Chile. Muchos de ellos fueron formados por religiosos enviados desde este rincón del mundo.
            Nos tomaremos de las fuentes entregadas en la Síntesis Histórica de la Orden de la Merced, específicamente al capitulo que trata de la Restauración de la Orden en Europa. ( P. 259 ss) 
            En esta empresa encontramos a un primer mercedario chileno. Nos referimos a Mons. Pedro Armengol Valenzuela, General de la Orden entre los años (1880- 1911). La síntesis histórica nos relata: “El 30 de enero de 1880, el P. Pedro Armengol Valenzuela es elegido Maestro General de la Orden. Al momento de su elección tenía 37 años y se desempeñaba como comendador de Valparaíso (Chile): En el mismo puerto se embarca para Europa el 26 de mayo, en compañía del P. Clodomiro Henríquez, llegando a Roma el 28 de julio de 1880…”
Un capitulo aparte merece la figura de Mons.  Pedro Armengol Valenzuela, pero en lo que nos compete a lo que estamos celebrando destaco algunos elementos que tienen que ver con la celebración de la beatificación de estos 19 mercedarios. 
Continúa la Síntesis histórica: “…Convencido de que la tarea fundamental de su mandato era la restauración de la Orden, dedicó a ello todas sus energías, inteligencia, experiencia y amor. Como primera medida abrió noviciados y casas de estudios para formandos. Con estratégica visión creó el noviciado en Roma, en el convento de San Adrián; luego del Olivar, en Aragón…”  Este último convento tendrá una importancia relevante en la formación de algunos de los mártires, muchos de ellos realizaron  su noviciado en ese convento.
 Cabe señalar en este punto, que en la formación de todo religioso, el noviciado es un año muy importante, consolida de alguna forma su experiencia religiosa y lo posibilita a emitir sus votos religiosos, al respecto nos lo recuerdan nuestras constituciones: “El noviciado tiene como finalidad facilitar al novicio, en la teoría y en la práctica, el conocimiento de las exigencias de la vida religiosa mercedaria, a fin de que, ejercitándose en los consejos evangélicos y realizando la íntima unión con Cristo en las actividades propias de nuestra Orden, se prepare para la profesión”, COM 143.
Continúo con la síntesis histórica:  “…Para formadores buscó a los mejores religiosos del momento: Hizo venir a Europa y especialmente a España a los padres Clodomiro Henríquez, Pedro José Ferrada, José Liñán de Ariza y Agustín Pérez, chilenos…” .Estos cuatro beneméritos religiosos de nuestra provincia de Chile contribuyeron con su testimonio de vida religiosa en la vida de algunos de los mártires  que serán proclamados beatos por nuestra Iglesia Católica, el próximo 13 de Octubre en Terragona, España.
Por estos días en que como familia religiosa nos alegramos por este acontecimiento y damos gracias a Dios por la vida de estos hermanos. Como mercedarios chilenos, no hemos de olvidar el valioso  y silencioso testimonio de estos religiosos  que supieron entregar lo mejor de sí en la compleja tarea que fue la  restauración de la Orden de la Merced en Europa, específicamente en la Provincia Mercedaria de Aragón, España.
            Vaya éste pequeño y humilde homenaje a estos religiosos chilenos que colaboraron en la inestimable empresa que encabezara  P. General Fray  Pedro Armengol Valenzuela. (1880-1911)
Revisemos un poco sus vidas, lo hare desde la recopilación biográfica que realizo el P. Héctor Guerrero Peña O. de M. Titulada: Recopilación de algunas biografías de religioso mercedarios chilenos difuntos 1858- 1994, año 1994 ; provincia mercedaria de Chile.

Fray Pedro Armengol Valenzuela Poblete  ( 1843-1922)



            “Hijo de Ignacio y de María de las Nieves, Pedro Armengol nació en Coipue, Gualleco- Provincia de Talca- El 05 de julio de 1843. En el bautismo se llamó Leandro.
            Su ingreso a la Orden mercedaria se realizó en Santiago el año 1861, a la edad de dieciocho años. Hizo su  noviciado en el convento de San Miguel ( Hoy día “ la Gratitud Nacional” de los PP. Salesianos ). Fue su maestro el P.  Benjamín Rencoret.
            Finalizado su año de noviciado, emitió la profesión de votos simples el día de San Serapio : 14 de Noviembre de 1862. La profesión de votos solemnes la hizo el 10 de febrero de 1866.
            Una vez realizados los estudios eclesiásticos, en el convento de Santiago, fue ordenado sacerdote el 22 de marzo de 1868 de manos de Mons. Rafael Valentín Valdivieso Zañartu, Arzobispo de Santiago.
            El año 1869 obtuvo los grados de lector de Filosofía, Teología y Oratoria según los estatutos aprobados en 1868 por S.S. Pío IX.
            Viaja a Roma el 13 de diciembre de 1869 a fin de perfeccionar sus estudios de teología, arqueología y lenguas clásicas y modernas. Estudió en la Universidad Gregoriana de Roma.
            Allá en el convento de San Adrián, convive con San Antonio María Claret. A su regreso a Santiago, se desempeñó como profesor de la casa de estudios en Santiago y  secretario provincial. En 1871 pasa al Ecuador en misión de la Orden. También enseñó ahí filosofía y teología . Este viaje a Ecuador lo hizo en su calidad de Secretario del Visitador Apostólico en Ecuador P. Benjamin Rencoret.
            Fue Vicario Provincial en Ecuador, de 1876 a 1877; de allí fue expulsado por el dictador General D. Ignacio Veintimilla.
            Regresó a Chile en 1877. Presentado en Teología, el 30 de junio de 1878. Es nombrado superior de Valparaíso, de 1877 a 1880.  
            El día 04 de septiembre del año 1879 es designado Maestro en Teología por el Vicario General de la Orden Revmo . P. Magín Beltrán.
            El 30 de enero de 1880 es elegido Maestro General de la Orden de la Merced; ejerció este cargo durante 31 años; restauró el instituto en Europa; le dio una nueva legislación y escribió varias obras de gran valor teológico, ascético y jurídico. Tomó posesión de su cargo el 31 de julio de ese año (1880). Fue el primer General que tuvo su residencia en Roma. Gobernó la Orden hasta el 24 de Agosto de 1911, por facultad especial de la S. Sede, aún después de ser obispo. Debido a eso demoró el viaje a su Diócesis (Ancud, Chile).
            León XIII lo nombró Consultor de Propaganda Fide, el 21 de septiembre de 1901, miembro de la comisión preparatoria del concilio plenario para América Latina.  
            San Pio X lo designó Miembro de la Congregación especial para la revisión de los sínodos provinciales en 1904 y Consultor para la codificación del nuevo Código de Derecho Canónico, el 9 de enero de 1904…
            El mismo pontífice, San Pio X, lo eligió Obispo de San Carlos de Ancud- Chile, el 30 de junio de 1910…años después Benedicto XV lo promovió a la sede Arzobispal titular de Gangra el 16 de diciembre de 1916.
            Su muerte ocurrió en Santiago el 10 de julio 1922. Tenía 79 años de edad. Dejó terminada la primera  parte de su “ensayo de Filología Americana comparada para contribuir a la tesis de la monogénesis del lenguaje  y de la especie humana”. Fue sepultado en la Basílica de la Merced, de la ciudad de Santiago de Chile.

Fray Clodomiro Henríquez Carreño ( 1855 – 1909)


            “Hijo de Pedro Regalado Henríquez y de Paula nació en Peumo, diócesis de Rancagua, población fundada por los mercedarios hace ya más de 400 años.
            A los quince años de edad sintió la vocación para la vida religiosa. Hecho su noviciado, emitió la profesión de votos simples en el convento Máximo ante el Comendador Fr. Basilio  Sanhueza el 08 de octubre de 1871. Testigos: Fr. Fidel Pinto.
            La profesión solemne la hizo el 23 de mayo de 1875. El P. Clodomiro fue activo colaborador del P. Maestro General Fr. Pedro A. Valenzuela Poblete en la Restauración de la Orden en Europa.
            Desempeñó el cargo de secretario General; Maestro de Novicios (en Roma); Superior y Maestro de Novicios en el Olivar (XI de 1884) y en Lérida (1888), en España.
            Después de diez años, regresó a Chile en 1890. Fue provincial de la Merced en Chile, 1890-1904. Asistió en Roma a la asamblea que convocó el P. Maestro General para el estudio del proyecto de las constituciones de la Orden recién redactadas.
            En 1884 es designado por el Maestro General comendador del convento del Olivar (España), sucediendo en este cargo al P. Antonio Lafuente fallecido el 23 de noviembre de 1884. En 1888 fue nombrado comendador del convento de Lérida ( España): su labor fue abnegada y fructífera en ambos conventos. En 1890 recibe la orden del P. Maestro General de trasladarse a Chile; así lo hace y recibe el nombramiento de Provincial de Chile.
En 1904 fundó la revista” Los hijos de María” que confió a la solicitud y competencia del P. Joaquín Valencia. En 1906 público el volumen “Pequeñas Conferencias” que contiene veinte conferencias sobre la B. V. María. Acá en Chile restauró el viejo templo de la Merced de Santiago, edificó el noviciado de Chimbarongo, cultivó las vocaciones religiosas, reformó los estudios.
El P. Henríquez fallece el 09 de octubre 1909. Fue un sacerdote a carta cabal, muy laborioso, culto y de una envidiable mansedumbre: Estas hermosas cualidades le granjearon muchos amigos tanto en su patria como en Europa. Fue querido y estimado por todos así en vida como después de muerto. 

Fray  Pedro José Ferrada Pastene  (? – 1911)


Hijo de Tomás y de Dolores, nació en Paredones – Provincia de Curicó- ya desde niño dio inequívocas muestra de su vocación religiosa.
            Ingresó a la Orden el año 1871, emitió la profesión de votos simples el 10 de noviembre de 1872 de manos del P. Basilio Sanhueza, superior de la casa de observancia de Santiago. Testigos fueron los PP. Eliseo López y H. Díaz. La profesión solemne la hizo el 31 de enero de 1876 en manos de P. Ignacio Beltrán, superior del convento máximo de Santiago.
            Antes de ordenarse de sacerdote, ya era un buen profesor de filosofía. Tuvo el cargo de Maestro de Estudios. Enseguida de recibir el orden del Presbiterado fue elegido para el cargo de comendador de Santiago.
            El Revmo. P. Maestro General de la Orden – Fr. Pedro Armengol Valenzuela Poblete- lo llamó a Roma para perfeccionar sus estudios: fue a la Universidad Gregoriana en donde, entre otros, le hizo clases el cardenal Mazella. En Roma fue también consultor del P. Maestro General que comenzaba su generalato.
            En el año 1887 fue enviado a España como uno de los antiguos restauradores de la antigua provincia de Aragón. Estuvo como comendador y Maestro de Novicios en el OLIVAR; recibió a los que más tarde fueron los PP. Manuel Sancho, P. Francisco Gargallo Gascón, Mariano Pina, fray Pedro Armengol Esteban Hernández (5 de los 19 mártires que serán beatificados el 13 de Octubre 2013)  y por último los hermanos Faustino y Policarpo Gasulla y otros más.  El  P. Ferrada hizo en ellos una abnegada y excelente labor de formación religiosa. Después de cinco años y medio regresó a Chile. Acá fue profesor de ciencias eclesiásticas. También fue Maestro de profesos; consejero y profesor…
            Entre las muchas cualidades y virtudes que cultivó el P. Ferrada cabe hacer resaltar : Facilidad de palabra, una gran dialéctica, vivo ingenio, austeridad y dominio de sí, observancia regular, mortificación, santidad y sabiduría; amor a la verdad, prudencia y humildad a toda prueba; era jovial, alegre, natural; enseñaba a hacer el bien: bondadoso, caritativo, compasivo, caballeroso, sabio. Sabía cinco idiomas: castellano, latín, francés, italiano, inglés.
            El P. Ferrada dejó una huella indeleble en sus discípulos que apreciaron cabalmente sus virtudes y a los que enseñó, más que con sus palabras, con el ejemplo de su vida.
            Estaba sirviendo en la viceprovincia mercedaria de Santísima Concepción cuando falleció en Curicó el día 24 de Septiembre de 1911, fiesta de la B.V.M de la Merced, después de recibir los santos Sacramentos y acompañado por sus hermanos de hábito.

Fray Pedro José Liñán de Ariza Piñero ( ? – 1942 )

            Hijo de Juan José y de María del Carmen, nace en Valparaíso. Finalizado su año de noviciado, emite la profesión de votos simples el 16  de Octubre de 1880 ante el P. Comisario General y Provincial Fr. Lorenzo Morales.
            Hizo la profesión solemne el 08 de Diciembre de 1833 ante el P. Provincial Fr. Basilio Sanhueza, fue ordenado sacerdote el 19 de junio de 1886. Recién ordenado sacerdote, el General de la Orden Fray Pedro Armengol Valenzuela, que conocía las dotes intelectuales del Neo- Sacerdote, sus virtudes religiosas y el Amor a la Orden que le inculcaron los Maestros formados en la reforma, lo eligió para que trabajara en la restauración de la Orden en la provincia de Aragón.
            El P. Liñán fue prefecto de coristas en Roma. Además, fue profesor en los conventos del Olivar y en Lérida (España)
            Vuelto a Chile el 26 de julio de 1893, desarrolló su actividad sacerdotal y pedagógica en los conventos de Santiago, Valparaíso, Curicó y Rancagua.
            En el capítulo provincial de 1920 dio cuenta de su actuación como Historiador de la Provincia y se tributó un voto de aplauso a la labor desarrollada.
            También fue maestro de novicios durante dos períodos. Comisario de la viceprovincia de Bolivia. Profesor de Latín, filosofía, cosmografía. Maestro de Sagrada Teología. Escribió variadas obras.
            Hizo clases en Santiago de Chile. Fue superior en los conventos de Valparaíso, Curicó y San Felipe. También se desempeñó como capellán de la cárcel y profesor de religión en el liceo de Curicó: Cuando era Superior de este convento terminó los trabajos del templo mercedario de tres naves que hay en esa ciudad.
            Este meritorio religioso falleció en el convento mercedario de Curicó el 3 de abril de 1942. Que Dios premie sus muchos trabajos y desvelos.

            De Fray Agustín Pérez, al momento de la redacción de este pequeño artículo no se encontraron mayores antecedentes.

            Concluyo este pequeño homenaje con las palabras de Fr. Florencio Roselló, Superior Provincial de la Provincia Mercedaria de Aragón, en la última edición de la revista:   Proyecto Libertad, Año XIV. Nº 49 . Junio 2013.
            “La Merced, quiere ser testigo de la beatificación de nuestros 19 Mártires mercedarios. Queremos estar con ellos cuando sean declarados beatos, y desde ese momento poder ofrecerles culto público… vivir con gozo y alegría este regalo de Dios, de que unos hermanos nuestros estén, a partir del 13 de octubre, en los altares.


Fray Mario Salas Becerra O. de M. 
        


Oración de los Beatos Mártires Mercedarios.

Señor Padre Santo, tú que concediste al Beato Mariano Alcalá y a sus compañeros fidelidad total a su vocación mercedaria siguiendo a Cristo Redentor hasta el martirio, y los hiciste testigos de la caridad perfecta en el perdón de sus perseguidores, concédenos, por su intercesión, la firmeza perseverante en la fe, y una caridad sincera para amar en Cristo a todos los hermanos. Por Jesucristo Nuestro Señor. Amén


Bibliografía:
  1. Síntesis Histórica de la Orden de la Merced, Roma 1997
  2. Recopilación de algunas biografías de religiosos mercedarios chilenos Difuntos 1858-1994, Fr. Hector Guerrero Peña, O. de M. , Santiago de Chile 1994
  3. Constituciones de la Orden de la Merced, Roma 1986
  4. Revista : Proyecto Libertad- Año XIV- nº 49 – Junio 2013